20.4.16

Ausencias

Todavía no me he acostumbrado
a hablar de ti en pasado.
Todavía te siento cerca.
Las lágrimas recorren mis mejillas cada noche,
los gritos de dolor ahogados en alcohol,
las sábanas frías en tu lado.
Me había acostumbrado a ti.
A un nosotros relajado,
a compartir mis cafés, mis poemas
y mis bromas.
Me había acostumbrado a ti.
He sentido que llorando,
la vida, golpe a golpe, se marchaba.
He sentido que la pena se apagaba,
que ya dejaba de llorar,
y eso me asustaba.
He temido que dejar de llorar,
sea dejarte ir.
He temido que allí donde estés,
se te haya olvidado leer.
Porque yo sigo enviando cartas
cada final de mes.