Coge tu pelo suelto,
que el aire está
harto de
recorrer, besar y arañar.
Hazte un moño despeinado
y ven, siéntate.
Deja de pasear tu sabida indiferencia
ante cualquier mediocre galán
que se arranque el alma,
al verte,
cada vez que responda,
tu soberbia,
en algún oscuro lugar.
Tú,
soberbia.
T-ú.
Que has vivido entre trenes,
horarios agotadores,
caprichos de fotógrafa,
y juegas,
sin terminar.
Que te acuestas cada noche
(sabiendo que pudiste,
volver loco a cualquier hombre),
sola,
con tu imaginación.
¿Una cerveza? Siempre.
¿Dos? Ríes.
¿Tres? Bailas.
Y besas,
al perder el cuento.
Ya no sabes,
si bebiste cinco...
o quizá seis.
Y ojalá
(diosa,
diva,
musa),
te acuerdes de "loquepudoser".
Olvida, "loquenofue".
Mañana,
nadie recordará,
si hubo cinco...
o quizá seis
que el aire está
harto de
recorrer, besar y arañar.
Hazte un moño despeinado
y ven, siéntate.
Deja de pasear tu sabida indiferencia
ante cualquier mediocre galán
que se arranque el alma,
al verte,
cada vez que responda,
tu soberbia,
en algún oscuro lugar.
Tú,
soberbia.
T-ú.
Que has vivido entre trenes,
horarios agotadores,
caprichos de fotógrafa,
y juegas,
sin terminar.
Que te acuestas cada noche
(sabiendo que pudiste,
volver loco a cualquier hombre),
sola,
con tu imaginación.
¿Una cerveza? Siempre.
¿Dos? Ríes.
¿Tres? Bailas.
Y besas,
al perder el cuento.
Ya no sabes,
si bebiste cinco...
o quizá seis.
Y ojalá
(diosa,
diva,
musa),
te acuerdes de "loquepudoser".
Olvida, "loquenofue".
Mañana,
nadie recordará,
si hubo cinco...
o quizá seis
No hay comentarios:
Publicar un comentario