Hoy he entrado en parada cardíaca,
lo único que aceleraba mis latidos
era esa forma tan tuya de mirarme,
como si estuvieses cayéndote
por
un
abismo.
El mío, mi abismo particular.
Ese por el que yo ruedo ahora
que tus ojos hechos de mar
ya no estan aquí para sujetarme.
Que tus besos no encienden mi cama.
La gente pasa a mi lado,
deben pensar que estoy ida.
Y es cierto, estoy en tu recuerdo,
en tus brazos y en tu boca.
Pero no me preocupa que estés allí
y no aquí a mi lado izquierdo.
Porque soy tan mía, tan tuya,
que ya no me duelen los kilómetros.
Sé que estás aquí.
Y otra vez, me volverás a mirar
como yo miró a las estrellas
cada día al amanecer.
Cuando tú abrazas mis miedos
y yo beso tu presencia,
en el botón verde de enviar.
Marinita Lol
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